

Rata negra (Rattus rattus)
Este tipo de roedores es llamado Rata negra o rata de tejado, ya que suelen habitar zonas altas, y no tanto zonas húmedas como la rata parda. Realizan nidos en zonas altas de desvanes, tejados, buhardillas, en definitiva, sitios cálidos y tranquilos.
Se ha sabido que, en el siglo XIV, fueron portadoras de pulgas que transmitían la peste bubónica, causando durante 400 años millones de muertes. Pueden causar daños en los alimentos por la contaminación de los mismos, deterioros en las estructuras roídas, orín o excrementos, mordeduras a humanos pudiendo ocasionar enfermedades como, por ejemplo; la rabia, salmonelosis, cólera o hepatitis.
Su ciclo reproductor es alto, teniendo de cinco a seis camadas al año, y cinco a ocho crías por cada camada.
Se reconoce bien por el pelaje, se ve limpio y aseado, más oscuro (negro), cola más larga que el cuerpo, anillada y hocico puntiagudo.
Rata parda/alcantarilla (Rattus norvegicus)
Este tipo de roedor es llamado Rata parda o rata de alcantarilla, nombre que indica su hábitat más común, y no tanto zonas altas como la rata negra. Realizan cuevas en el alcantarillado, y utilizan este para moverse por toda la red de saneamiento, en definitiva, sitios húmedos y oscuros.
Pueden causar daños en los alimentos por la contaminación de los mismos, deterioros en las estructuras roídas, orín o excrementos, mordeduras a humanos pudiendo ocasionar enfermedades como, por ejemplo; la rabia, salmonelosis, cólera o hepatitis al igual que la rata negra.
Su ciclo reproductor es alto, teniendo de dos a ocho camadas al año, y dos a catorce crías por cada camada.
Pelo gris oscuro, desaliñado, cola más corta que el cuerpo, orejas pequeñas y hocico biselado.




Ratón domestico (Mus musculus)
Este tipo de roedores es llamado Ratón doméstico o ratón común. Es un roedor de tamaño pequeño, con una media de 10cm entre el cuerpo y la cabeza y un peso hasta 30g. Su cola mide la mitad de su cuerpo.
Se alimenta de todo tipo de sustancias orgánicas, carroña, animales pequeños y semillas, entre otros.
Construyen nidos excavando túneles y galerías bajo tierra, en paredes o suelos y los aíslan para protegerlos del frio.
Su ciclo de reproducción es muy alto, las hembras gestan los embriones alrededor de 20 días, teniendo entre 3 y 10 crías por camada.
Se encuentran en toda la península ibérica y pueden ser transmisores de enfermedades a los humanos, por contacto directo o por contaminación de alimentos.